Duración: 5 compases 12/8.
Cambios: 6.
Dificultad: Nivel 4.
Richard Strauss ha sido considerado el último gran exponente del sinfonismo (post) romántico y del drama musical. Al final de su larga vida compuso cuatro canciones para soprano y orquesta que se han sumado a lo más interpretado de su obra.
Análisis
La escena de amor de este poema sinfónico se cierra con un largo pedal de tónica (en Sol bemol mayor) coloreado con sugestivas y delicadas armonías de carácter vagamente cadencial.
La última de ellas está basada en el conocido I-II2-V-I, aunque con notables variantes. En primer lugar, colorea el II2 grado mediante una línea descendente por los grados ♭7-6-♭6. Finalmente, encontramos la función de tritono (♭V) como dominante de la dominante (♭V-V).
Rey supremo del caramelo y el almíbar.