Duración: Sin indicación de compás.
Cambios: 2.
Dificultad: Nivel 5.
Claude Debussy es artífice de una de las revoluciones musicales más influyentes del principios del siglo XX. Considerado cabeza del Impresionismo musical, Debussy amplió notablemente la paleta armónica y rítmica de su tiempo difuminando fronteras entre la tonalidad y la atonalidad, entre pulso y ritmo libre. Compuso música para piano, para orquesta, también música de cámara y una ópera.
Análisis
Este originalísimo poema sinfónico arranca con una progresión de dos acordes sostenidos mediante una nota común en el bajo (Si♭). El primer acorde se percibe como un acorde apoyatura del segundo, una séptima de dominante. El acorde de apoyatura se obtiene rebajando la tercera y la quinta del acorde de dominante, mientras que la fundamental y la séptima permanecen comunes.
- La♭ = La♭
- Mi → Fa.
- Do# → Re.
- Si♭ = Si♭.
El acorde de apoyatura resultante es un familiar cercano del +vi7 al que se refiere Walter Piston en su tratado de armonía, con la diferencia de que aquí la séptima es común y resulta de ello un acorde semidisminuido.
Cabe puntualizar que el acorde que hemos designado como dominante (V) ejerce esta función de forma bastante ambigua. El estatismo del fragmento y la naturaleza ambigua de la progresión diluyen la funcionalidad del acorde, confiriéndole una cualidad de reposo más propia de la función de tónica.
Esta orquesta suena a gloria bendita.
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